Edificio Moneo

Espai Estrella

El edificio Moneo, sede actual de la Miró Mallorca Fundació se inauguró en 1992. Proyectado por el arquitecto Rafael Moneo es el resultado de la donación de Pilar Juncosa, viuda de Miró, a la ciudad de Palma.

  • Espacio de exposición

    • Espai Estrella
  • Fechas

    • 3 diciembre 2014 — 3 junio 2016
  • Inauguración

    • 3 diciembre 2014
    • 00:00
Exposiciones

Joan Miró. La luz de la noche. Obras de las décadas de 1960 y 1970

3 diciembre 2014 — 3 junio 2016

En "la luz de la noche", libro del que la exposición toma el título, el gran ensayista italiano Pietro Citati habla de algunso de los grandes mitos en la historia del mundo. Citati describe como muchos autores antiguos de diferentes culturas hacen referencia a una luz rápida y centelleante, la luz de la noche, que enciende las almas de los hombres con un rayo de beatitud; justo en ese preciso momento éstos creen haber accedido a las cosas divinas

Joan Miró (Barcelona, 1893 – Palma de Mallorca, 1983), a quien su amigo Sir Roland Penrose llamó Señor de la noche, creó una mitología visual propia e inolvidable, en la que los protagonistas son la noche, las visiones y los sueños, las estrellas y las constelaciones, además de pájaros extraños y mujeres singulares. Esta temática aparece ya en su producción de la década de 1920 y será muy frecuente en los años treinta y cuarenta; volverá a utilizarla de nuevo, aunque no de manera exclusiva, en el último tercio de su vida, cuando realizó las obras que aquí se presentan. Su trabajo tiene un carácter profundamente espiritual, además de revolucionario en los aspectos formales, y resultó fundamental, por ejemplo, para el desarrollo de la pintura norteamericana de los cincuenta (Gorky, Pollock, de Kooning, etc.).

Esta exposición presenta una cuarentena de obras, entre las que se encuentran pinturas raramente expuestas, un tapiz de gran formato y un grupo importante de esculturas de bronce, donde Miró explora el poder evocador de los objetos. Las pinturas demuestran que Miró siguió explorando las posibilidades de distintos materiales durante toda su vida, pintando sobre plástico, zinc, lona, madera, cartón o masonita. En estas pinturas domina el color negro, con sus connotaciones nocturnas; los lienzos están poblados por cabezas y personajes, además de mujeres y pájaros. El mundo simbólico de Miró es ambiguo, aunque se manifiesta mediante estas imágenes líricas que constituyen tributos a la noche como umbral del misterio poético o artístico.