#TriánguloMiró

Paisajes emocionales e íntimos

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Barcelona/Mont-roig/Mallorca

El Triángulo Miró son tres lugares, tres paisajes emocionales para entender y profundizar en la obra y el espíritu de Joan Miró.

Barcelona – la Fundació Joan Miró – centro de referencia para estudiar y contemplar su obra, desde los inicios hasta el final. Montroig, – la Fundació Mas Miró – las raíces, la tierra y la inspiración; punto de partida y origen de su obra. Y Mallorca, – la Fundació Miró Mallorca -, el taller que siempre había soñado y tres décadas de creación artística en la isla refugio.

Barcelona, Mont-roig, Mallorca. Inspiración, arquitectura y arte. Tres referentes, tres vértices de un triángulo imprescindible para entender la totalidad de la obra mironiana.

©Fundació Joan Miró. Foto: Pep Herrero

Joan Miró y Barcelona

La Fundació Joan Miró de Barcelona exhibe una de las colecciones más importantes de obra de Joan Miró y permite hacer un recorrido exhaustivo por todas las etapas de su cronología vital y artística. El edificio, diseñado por Josep Lluís Sert, de estilo racionalista y con rasgos mediterráneos, fue proyectado específicamente para acoger la obra de Joan Miró. La Fundació Joan Miró es también un espacio de referencia por su impulso a la creación de artistas actuales.

 

 

 

© Fundació Mas Miró

Joan Miró y Mont-roig del Camp

Miró pasará casi invariablemente todos los veranos hasta 1976 en la masía que sus padres compraron en Tarragona en 1911. El arraigo al paisaje de Mont-roig primero y, posteriormente al de Mallorca, donde se acaba estableciendo definitivamente en los años cincuenta, será determinante en su obra y en su lenguaje. Barcelona, Mont-roig, Mallorca, pero también París (años veinte), Nueva York (años cuarenta) y Japón (años sesenta), formarán sus paisajes emocionales, aunque Mont-roig será siempre el contrapunto, el choque original al que siempre vuelve y, por tanto, su paisaje emocional más importante.

 

© Miquel Julià

Joan Miró y Mallorca

La Fundació Miró Mallorca es un lugar único en el mundo. Un centro cultural que permite descubrir el arte de Joan Miró y estudiar el proceso creativo en el lugar donde el artista residió y trabajó durante casi 30 años. Para Joan Miró, Mallorca significó un extraordinario lugar de creación en paz y libertad, que reunía todo lo que el artista necesitaba. A la edad de 63 años se instaló definitivamente en Son Abrines, Cala Mayor, donde dispuso del estudio «soñado», el Taller Sert.

En la actualidad la Fundació cuenta con un fondo de cerca de 7.000 obras y tres edificios singulares que constituyen uno de los conjuntos arquitectónicos más valiosos de Mallorca. El Taller Sert, estudio diseñado por el amigo y arquitecto Josep Lluís Sert y construido en 1956; Son Boter, una casa mallorquina del siglo XVIII que el artista utilizó como segundo estudio de pintura y escultura; y el Edificio Moneo, sede de la Fundación, diseñado por Rafael Moneo e inaugurado en 1992. Las dos primeras construcciones se han declarado Bien de Interés Cultural (BIC).